El
Instituto Nacional Autónomo de Investigaciones Agropecuarias, INIAP,
promociona la elaboración de abonos orgánicos, con el fin de de
impulsar una agricultura limpia.
Los costos elevados de los fertilizantes químicos, en gran medida, ha inducido al agricultor a buscar alternativas de fácil aplicación y que reduzcan los costos de producción.
La alternativa es la producción de abonos orgánicos con materiales existentes en las fincas de los productores.
En la Estación Experimental del Austro se ha generado técnicas validadas en el campo, sobre las actividades necesarias para la captura de microorganismos, que ayudan a descomponer la materia orgánica para la producción de compost.
Además, se tiene recomendaciones para la elaboración de bioles, que es un fermento de diferentes materiales vegetales que, con la ayuda de melaza y levadura en el proceso de fermentación del biol, se establecen hongos y bacterias benéficas.
Todas estas prácticas se han compilado en un “Manual de Producción de Abonos Orgánicos”, realizado por Carlos Feicán Mejía, técnico de la Estación Experimental del Austro del INIAP.
Este trabajo y su publicación fueron realizados gracias al apoyo de la Secretaría Nacional de Educación Superior, Ciencia y Tecnología e Innovación, mediante el proyecto “Desarrollo de los Sistemas Agro productivos para Mitigar la Pobreza, mediante la Capacitación y Transferencia de Tecnología”.
Este trabajo se realizó en los en los Cantones Biblián, Azogues, pertenecientes a la provincia de Cañar; Guachapalá y Nabón, en azuay; Saraguro y Gonzanamá, en la provincia de Loja.
Fuente: INIAP
Los costos elevados de los fertilizantes químicos, en gran medida, ha inducido al agricultor a buscar alternativas de fácil aplicación y que reduzcan los costos de producción.
La alternativa es la producción de abonos orgánicos con materiales existentes en las fincas de los productores.
En la Estación Experimental del Austro se ha generado técnicas validadas en el campo, sobre las actividades necesarias para la captura de microorganismos, que ayudan a descomponer la materia orgánica para la producción de compost.
Además, se tiene recomendaciones para la elaboración de bioles, que es un fermento de diferentes materiales vegetales que, con la ayuda de melaza y levadura en el proceso de fermentación del biol, se establecen hongos y bacterias benéficas.
Todas estas prácticas se han compilado en un “Manual de Producción de Abonos Orgánicos”, realizado por Carlos Feicán Mejía, técnico de la Estación Experimental del Austro del INIAP.
Este trabajo y su publicación fueron realizados gracias al apoyo de la Secretaría Nacional de Educación Superior, Ciencia y Tecnología e Innovación, mediante el proyecto “Desarrollo de los Sistemas Agro productivos para Mitigar la Pobreza, mediante la Capacitación y Transferencia de Tecnología”.
Este trabajo se realizó en los en los Cantones Biblián, Azogues, pertenecientes a la provincia de Cañar; Guachapalá y Nabón, en azuay; Saraguro y Gonzanamá, en la provincia de Loja.
Fuente: INIAP
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