En Chone escasea el plátano

A mediados de junio se empezó a evidenciar la escasez de plátano en sus dos variedades, el dominico y el barraganete. Los comerciantes locales han tenido que proveerse del producto que llega desde El Carmen y Quevedo, pero no es del agrado de los consumidores.

Para Boris Zambrano Cabrera, el problema se debe en parte al último invierno que destruyó el plátano sembrado en las vegas de los ríos Mosquito y Grande. “Si calculamos que una hectárea de plátano puede rendir 600 racimos anualmente, al perder 30 hectáreas, nos quedamos sin cosechar 18.000 racimos, por lo tanto se provoca desabastecimiento”.

Zambrano mencionó que la compañía que trabaja en el sitio El Jobo en la construcción de la represa agravó el problema, porque con los trabajos botaron material al río Grande, provocando una enorme riada que destruyó las plantaciones de cacao, plátano y cítricos, desde ese sitio hasta Dos Bocas (unión de los ríos Mosquito y Grande).


Falta de producción preocupa

“En el supuesto no consentido que se haga la represa, vamos a quedar más desabastecidos de alimentos porque allá se perderán miles de hectáreas de tierras fértiles que están cultivadas cuya producción es la que abastece el mercado local”, dijo.

Manuel Cedeño, habitante del sitio Río Plata de la parroquia Ricaurte señaló que la producción agrícola y pecuaria enfrenta muchos problemas en la actualidad. No hay producción de cacao y el precio del café no alcanza ni para los jornales (pago) de los trabajadores. Además los caminos no están abiertos en su mayoría.

Teófilo Moreira, del sitio Coñaque confía en que con la cosecha de mandarinas puedan mejorar sus condiciones de vida. Aunque la situación se complica cada día  porque no hay circulante, peor aún productos como el plátano y cacao, argumentó.

Comerciantes preocupados
 
Los comerciantes de plátanos del Centro Comercial de Chone mostraron su preocupación por la falta del producto.

Byron Zambrano dice que el poco producto es llevado a otros sectores. “Los agricultores prefieren exportarlo por un mejor precio, dejando desabastecido el mercado local. La ciudadanía reclama, pero qué podemos hacer nosotros”. 

Zambrano agrega que debería regularse en beneficio del consumidor. El poco plátano que llega al mercado no alcanza para la demanda.

Como comerciante está preocupado pero espera que el tiempo mejore.

Fuente: Diario “La Hora”